sábado

El día

Todo comienza una noche antes, muy seguramente no podré der dormir, estaré muy nerviosa y tal vez un poco asustada, subiré al techo a meditar y ver las estrellas sola por última vez, o tal vez solo me quedare acostada, pensando en que al día siguiente tendré unas enormes ojeras y no me veré linda... en fin supongo que en algún momento me quedare dormida, de lo que si estoy segura es de que kammi dormirá a mi lado esa noche, las pocas horas que dormiré pasaran lentamente, despertare cada poco y el reloj habra avanzado unos cuantos minutos... asi sera toda la noche. Al día siguiente cuando el sol entre por la ventana y no me permita  dormir más tiempo, o tal vez cuando mi madre entre al cuarto a levantarme, no podré creer que el día llego, medio dormida me levantare... abriré la ventana y respirare el aire fresco, suspiro... la felicidad comenzara a inundar mi cuerpo poco a poco... bajare... caminare hacia la cocina aunque yo sé que no podre comer, tendré el estómago echo nudos, si mucho tomare algo de yogurt y frutas mientras espero la hora de comenzar a arreglarme... no estaré sola, ellas estarán ahí, aquellas chicas que al pasar los años, se fueron volviendo una parte importante de mí, aquellas con las cuales pude llorar, reír, pelear, pero a pesar de todo siempre estuvieron ahí, estarán felices por mí, y yo estaré feliz de que ellas estén a mi lado ese día tan especial, recordaremos cosas, momentos, platicas, estupideces que hicimos juntas, y hasta el momento no podré recordar un momento tan perfecto, tan sublime, el tiempo pasara rápido, y será hora de ponernos guapas, llegan las personas que nos arreglaran, y comienzan a hacerlo, seguiré nerviosa lo sé, y sé que mientras más se acerque el momento más nerviosa estaré, pero confió en que la felicidad será más grande que los nervios, un maquillaje sencillo pero elegante... cubrirá cualquier señal de cansancio, labios rojos y un poco de brillo, combinado con un peinado relajado, algunos risos caerán por mi espalda. ya casi es hora, mis damas ya están listas y es hora de ponerme el vestido, al ir a mi habitación el vestido estará colgado frente a la ventana, en la cama estarán los zapatos el tocado y algunas joyas, me veré en el espejo antes de comenzar con el ritual, una enorme ventana y un hermoso vestido, elejido especialmente para ese día serán mi background en ese momento, seguiré sin creer que todo eso está pasando, pero tengo que seguir, tal vez una lagrima caiga, todo el día abre tenido ganas de llorar, pero será llanto de felicidad, soy de esas personas que lloran por todo, porque están tristes o demasiado felices, aunque no muchas personas pueden verme llorar ya que soy de llanto silencioso, mis damas entran y toman el vestido, ellas ya están listas, al desvestirme veré cada uno de mis tatuajes, tanto los que yo decidí hacerme, como los que yo nunca quise pero la vida se aferró a que me dejaran marca, recordare cada historia relacionada con ellos, pero no hablare, no las contare, ya habrá tiempo para eso, tal vez habrá una que otra pregunta sobre alguno de ellos, yo responderé de manera relajada, con una sonrisa en el rostro, solo lo más indispensable para no dejar con la duda, doy unos cuantos pasos y el vestido estará delante de mí, con cuidado lo levantaran para que este donde debe estar, y en unos momentos el vestido está en su lugar, alguien subirá el cierre o tal vez ajustaran algunos listones para que el vestido se quede dónde debe toda la noche, es blanco, ajustado de arriba, un hermoso corte a la cadera, y amplio de abajo, la tela es hermosa, tiene un lindo bordado el cual sentiré cuando este cubriéndome. Con mis dedos recorreré algunos relieves, tal vez en esta ocasión aquella lágrima testaruda se salga con las suyas y caiga por mi mejilla, siempre espere ese momento, por mucho tiempo fue lo que me mantuvo con vida, esa ilusión de vivir un día perfecto. frente al espejo girare y analizare cada detalle del vestido, de mi cuerpo, de mi rostro, mi cabello, me veré linda... habrá un brillo especial en mis ojos, uno nunca antes visto, mi madre entra al cuarto me dice que ya es hora, y que me veo bonita, ella llorara, y yo llorare, me felicitara y me dirá que me echara de menos, yo tratare de ya no llorar, sostendré el aire, y la abrazare, ella también se verá preciosa como siempre, al bajar, mis tías también estarán ahí, al verme también me dirán que me veo bonita, yo sonreiré y una a una las abrazare, si mis abuelos aún viven también estarán ahí... si no... Caminare hasta el lugar donde estará colgada la foto del día que se casaron y en silencio hablare con ellos, les diré que los extraño y que desearía que también estuviesen ahí. alguien dirá que es hora de salir, seguramente se nos hará tarde... pero supongo que es costumbre, si no se nos hiciera tarde todo sería un desastre, saldré y yo seré la primera en entrar al coche, en un lado de mi ira Claudia... si... ella tiene que estar ahí, me recargare en su hombro y le sonreiré, ella sonreirá también y reiremos juntas, todo el camino será un desastre.... iremos gritando, bailando, riendo, siendo felices, trataran de desaparecer mis nervios, pero eso es algo imposible... casi llegamos a la iglesia y con cada centímetro que el coche avanza mi corazón late más y más fuerte. Oh no... llegamos... por un momento me paralizo, entro en pánico, mis damas van saliendo una a una del coche, veo por la ventana y todos están ahí... esperándome... como puedo... me obligo a avanzar y salir del coche... veo muchas caras conocidas, felices, y eso me llena de felicidad, supongo que mi padre estará ahí... no se lo perdería por nada del mundo... pero no sé si yo quiero que este ahí, me da tristeza que él tome mi mano y me guie hasta el altar, cuando fue mi madre la que siempre estuvo ahí guiando mi camino, pero sé que mi mama es muy testaruda y no me permitirá que lo deje fuera de eso... ni hablar... ya es hora de entrar, los pequeños pajes que momentos antes estaban corriendo fuera de la iglesia, ahora están detrás de mí y sostienen la cola de mi vestido, son tan lindos... que me sacan una sonrisa al imaginar que algún día tendré algunos de ellos entre mis brazos, y serán solo míos, en fin todos están en su lugar y una marcha nupcial es la señal de que tengo que avanzar, comenzamos a caminar y ahí está el, no ha volteado, está nervioso también pero en cuanto escucha la melodía, y se da cuenta de que yo estoy ahí... detrás del... gira la cabeza, tiene que verme, y yo tengo que verlo, sutilmente sonríe, y eso me tranquiliza, también hay un brillo en sus ojos y yo no puedo con la felicidad, contengo el aire y comienzo a caminar, al llegar ahí... mi padre extiende mi mano y la coloca sobre la suya, le dice que me cuide, y el asiente con la cabeza, mi padre se va y toma su lugar... Él me dice que me veo preciosa y yo me sonrojo, sonrió... todo es perfecto, la misa transcurre tranquilamente, y demasiado rápido, pero disfruto cada segundo que pasa, es hora de entregar mi ramo, juntos, tomados de la mano nos dirigimos hacia donde está un cuadro de la virgen, la veo y le doy gracias por permitir que todo eso este pasando, el rodea mis hombros con sus brazos y me dice que es hora de irnos, algunas personas se unen a nosotros mientras caminamos afuera de la iglesia, nos felicitan y nosotros agradecemos y sonreímos, al llegar afuera miles de burbujas flotan por todo el lugar, uno a uno... aquellas personas importantes... nos abrazan y felicitan, nada podría ser mejor, al ver a cada persona recordare un momento importante con cada una de ellas... pero ya es tarde de nuevo, como es de esperarse las fotos no pueden faltar, un bueno fotógrafo... amigo de la familia es quien tomara las fotos, aun no se quien... pero en ese momento sabré que no habrá nadie mejor para tomarlas, de camino a las fotos me enterare de que el novio se perdió y no daba con la iglesia, de que al padrino se le olvidaron los anillos y tuvieron que salir corriendo a buscarlos, de que en el salón se habrá rompido un arreglo, y de que tuvieron que improvisar para que todo siguiera siendo perfecto, las fotos serán únicas, tampoco se cómo serán.... pero sé que serán una de las partes más importantes de la noche. sonreiré en todas y cada una de ellas, y será imposible no ver en ellas el amor y la felicidad que irradiamos los dos... oh... después de las fotos recuerdo que con las prisas olvide comer en todo el día... ni hablar... mi nuevo y amado marido no querrá que me quede sin comer, no lo permitiría, y muy seguramente me estará regañando por eso... tenemos que comer algo rápido, y que mejor que una pizza.  padrinos, unos cuantos familiares y los nuevos novios, nos dirigimos a comer... sin importar que no estemos vestidos para algo tan común, la pizza se acaba rápido, pero yo no soy capaz de comer más de una rebanada, los nudos de mi estómago no desaparecerán hasta que el día termine. Después de eso tenemos que ir al salón. la noche aún no termina y hay un itinerario, al llegar las luces estarán encendidas, y muy poca gente habrá llegado en ese momento, pero ya irán llegando, familiares... amigos... ex-amigos... en fin... personas importantes (:... indispensables, también algunas cuantas que no conoceré, pero que ese día... están ahí por alguna razón importante. mientras la gente va llegando, nosotros los saludamos, toda la noche será así, no podremos parar ni un segundo, pero todo tiene un inicio... y ya es la hora, hay que entrar... primero nuestros padres y padrinos, y al final nosotros, enseguida hay que bailar el primer vals, música de piano... echa especialmente para ese día, especialmente para nosotros (Si estás leyendo esto date cuenta de que tu escribirás ese vals y tienes que ir comenzando (: ), mientras bailamos, él acerca su frente a la mía, no podemos dejar de mirarnos, recordaremos todo lo que hemos vivido juntos, tal vez susurrando, tal vez cada quien en silencio pero nuestras miradas lo dirán todo... cada nota del vals es especial... pero todo termina, ahora es hora de divertirse, bailaremos un rato, pero también tenemos que ocuparnos de nuestros invitados, visitar cada mesa, hablar un poco con cada uno de ellos, ver si se les ofrece algo... todo... es hora del brindis... en la mesa estarán esas personas indispensables en nuestras vidas, aquellas con las que hemos compartido todo y nos han apoyado tanto, también hay que cortar el pastel... sinceramente después del vals me resulta difícil visualizar cualquier cosa, pero eso no quita que cada instante del día deje de ser especial... al terminar el baile el día habrá terminado... muy seguramente y conociéndome terminaremos jugando cartas mientras esperamos la hora de irnos de luna de miel... no sé.... 


Y bien... ese fue el día de mi boda... un día que siempre espere, que siempre esperare, un día que tiene que ser perfectamente imperfecto... y quien sabe... tal vez, cuando ese día llegu,e no sea el día de mi boda... tal vez  cuando ese día llegue... será el día de nuestra boda... uno nunca sabe... con la persona correcta todo puede ser diferente (: